La esclerosis múltiple (EM) y la esclerosis lateral amiotrófica (ELA) son dos enfermedades que, comúnmente, se confunden al compartir el término “esclerosis”. Aunque ambos son trastornos neurológicos, la EM es una enfermedad que afecta al sistema nervioso central, mientras que la ELA es una enfermedad neuromuscular, en la que las afectadas son las motoneuronas.
1.Sintomatología:
Aunque en un inicio comparten síntomas como debilidad o rigidez muscular, problemas de movimiento y de coordinación, conforme avanza la enfermedad se encuentran algunas diferencias:
- Esclerosis múltiple: síntomas motores, sensitivos, emocionales y cognitivos. Pueden aparecer crisis de ansiedad, depresión y problemas de memoria y atención, entre otros.
- ELA: aparecen problemas motores que hacen que fallen los movimientos voluntarios, pero no suelen darse síntomas cognitivos.
2. Causas de la esclerosis:
A pesar de que no se conoce la causa de ninguna de las enfermedades, en la EM la principal afectada es la mielina; mientras que en la ELA, el ataque se produce en las motoneuronas.
3. Edad y género:
La esclerosis múltiple tiene una edad de aparición más temprana, entorno a los 20 y 40 años. Mientras que la ELA suele diagnosticarse entre los 40 y 70 años. Por ello, la EM es la segunda causa de discapacidad no traumática en jóvenes.
Por otro lado, la EM es más común en mujeres, mientras que se conocen más casos de ELA en hombres que mujeres.
4. Heredabilidad:
La ELA tiene un factor heredable más estudiado que la EM. Se conoce que un 10% de los casos de ELA están relacionadas con la mutación de un gen heredado.
5. Evolución de la enfermedad:
- En la eslerosis múltiple, el 85% de los pacientes son del tipo remitente-recurrente. Estos, sufren brotes puntuales que remiten, seguidos de periodos de recuperación. Por otro lado, el 50% sufren el tipo secundario progresivo, que es mucho más lento. Los pacientes con EM pueden convivir con la enfermedad siempre que exista un tratamiento y progreso controlado. Por último, tan solo un 15% de casos tiene una evolución sin periodos de recuperación.
- La esclerosis lateral amiotrófica siempre tiene un curso progresivo, sin períodos de estabilidad. Por tanto, se trata de un deterioro constante, en el que la esperanza de vida es de 3 a 5 años de que se recibe el diagnóstico.
6. Tratamiento de la esclerosis:
Aunque no existe una cura para ninguna de las dos, sí hay tratamientos que pueden aliviar los síntomas y mejorar la calidad de vida de los afectados.
En la EM remitente-recurrente, el tratamiento farmacológico con interferones ha demostrado su eficacia y existe gran variedad comercializada. Por el contrario, en la ELA sólo hay un fármaco, bloqueante del glutamato.
Sin embargo, en cuanto a los tratamientos no farmacológicos como la psicoterapia, fisioterapia, logopedia o estimulación cognitiva, existen diferentes opciones según la gravedad y el avance de la enfermedad.