El trastorno depresivo mayor, comúnmente conocido como “depresión”, es un trastorno mental caracterizado, fundamentalmente, por bajo estado de ánimo y pérdida del interés, que alteran el comportamiento de la persona y afectan a diferentes áreas de su vida diaria como la laboral, familiar o social. Para ello, debe cumplir cinco o más de los siguientes síntomas:
- Estado de ánimo depresivo
- Disminución del interés por actividades que antes resultaban agradables
- Pérdida o aumento del peso
- Insomnio o hipersomnia (dormir en exceso)
- Agitación o retraso psicomotor
- Fatiga o falta de energía
- Sentimientos de culpa y desesperanza
- Baja capacidad de concentración
- Escasa toma de decisiones
- Pensamientos sobre la muerte o el suicidio
Es importante descartar que estos síntomas puedan suceder por efecto de sustancias o por otra enfermedad médica como, por ejemplo, el hipotiroidismo.
Otros trastornos depresivos
Otros trastornos depresivos en adultos son:
- Distimia o trastorno depresivo persistente. Se caracteriza por un estado de ánimo depresivo que aparece regularmente casi todos los días, la mayor parte del día. A diferente del trastorno depresivo mayor, éste es de menor gravedad. Es un trastorno de larga duración y no se diagnostica hasta pasados dos años de su inicio.
- Trastorno disfórico premenstrual. Aparece inestabilidad emocicional, irritabilidad, disforia y síntomas de ansiedad durante la fase premenstrual, que remiten alrededor del inicio de la menstruación.
¿Qué tratamientos existen para la depresión?
Actualmente, algunos de los tratamientos utilizados en la depresión son:
- Terapias psicológicas. Terapia cognitivo-conductual, emotiva, familiar… Tiene como objetivo guiar al paciente y dotarle de estrategias para comprender lo que está viviendo y los síntomas que está experimentando a nivel físico, emocional y cognitivo; para hacer frente a la situación.
- Tratamiento psicofarmacológico. Utiliza medicamentos para modificar y producir la química cerebral y así conseguir la mejoría de los síntomas.
- Neurofeedback. Es un tratamiento no invasivo que trata de modular la actividad cerebral asociada a los síntomas, consiguiendo beneficios en el estado de ánimo y el resto de síntomas relacionados.
La terapia psicológica y el Neurofeedback han evidenciado sus beneficios, como alternativa a los fármacos, lo que reduce el riesgo de efectos secundarios y aumenta la probabilidad de que se mantengan a largo plazo.